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miércoles, 22 de julio de 2009

Otra forma de encoger el ombligo

Lunes 20 de julio las 13:30, llevaba unos 15 minutos en la ronda litoral de Barcelona con una caravana intensa. La suerte de ir en moto es que avanzas mucho más rápido que el resto de vehículos, eso sí, atento a cualquier cambio de carril inesperado y sin previo aviso de los muchos conductores que ocupaban los dos carriles. No pasaron muchos minutos más para llegar a la altura de una UVI móvil y la guardia urbana dando paso para agilizar el tráfico. La razón, un motero en el suelo, ya con collarín y su 600cc unos metros más allá. Suerte del casco y por su bien espero, que como mínimo, llevase guantes.
Durante todo el año y casi cada día voy en moto y soy testigo de como, a partir de la primavera, el parque motero se multiplica de forma exagerada. Y cada año no deja de sorprenderme, y de ahí que se me encoja el ombligo, ver a muchos
moter@s sin la equipación pertinente.
En el post de esta semana quiero unir mi voz a la de periodistas, traumatólogos, neurólogos, incluso pilotos de GP, en la necesidad de ir bien equipado, y eso no significa sólo llevar el casco. Yo he sufrido varios sustos y dos accidentes de moto; en el segundo, a pesar del duro golpe contra el coche que se salto un stop, no me ocurrió nada gracias a la ropa de cordura, mi piel salió ilesa. Pero el anterior a éste... a pesar de que este verano va ha hacer ya 10 años, las señales en mi cuerpo son imborrables.

Tengo una amiga traumatóloga, que también fue motera, y de vez en cuando me recordaba “Xavi romperte te puedes romper, pero salva la piel” y las abrasiones con el asfalto son críticas. Recuerdo a Toni Elías en una entrevista que nos trataba de locos del asfalto por el mero hecho de ir en moto, por las carreteras en las que transitamos, entre coches, en la ciudad. Y uno piensa, “pero tú ¿Has visto lo que haces con la moto, chaval?”. No hace falta ir muy lejos en el tiempo para recordar el accidente que tuvo Mika Kalio en Assen, aún llevando guantes se hizo mucho daño en un dedo y si queréis encoger vuestro ombligo, mirad la pág. 75 del Solomoto de esta semana.

Desde le blog quiero animar al uso de los guantes, de un calzado adecuado, que cubra el pie (anda que no duele el típico golpecito en el dedo pequeño), los tobillos están cubiertos por una fina capa de piel... y si vais a coger carretera o autopista, usar la chupa de verano. Obviamente, cuando estás parado en un semáforo rodeado de coches, y el ventilador refrigerando el motor no es la mejor sensación de libertad que te ofrece la moto, pero si vas protegido esa sensación de libertad puede durar más al sufrir un accidente (cosa que no deseo a nadie) pero como dice otro amigo mío, las estadísticas nos ayudan a ver el camino.
De nuevo tú eres tu propio responsable, ¿apuestas por tu protección hoy o lo dejas para mañana?


Saludos.

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