El domingo 20 de Enero corrí en Cabrera de mar la primera de las 12 carreras que me he propuesto hacer este año como un colaborador más de la Fundación Menudos Corazones.
Antes de seguir con la explicación de lo vivido quiero dar las gracias a los sponsors que han iniciado conmigo esta aventura. Buff, Compex, ditades.net, Basicmatica, AZWALLACE y Orthos.
Fueron 14 km. y 1100 m. de desnivel acumulado. Curiosamente
muchas personas de la zona aún se preguntan de dónde salían tantos metros de
desnivel ya que es un pueblecito costero, yo tampoco lo sabía, mis
piernas ahora sí.
El sábado llovió durante todo el día y me temí una carrera
pasada por agua, pero la meteorología sacó bandera blanca y nos dio tregua para
el domingo, regalándonos un bonito día.
Sinceramente, volver a cruzar la línea de salida de
cualquier carrera me produce cierto nerviosismo, sabes que te vas a enfrentar
al reto de alcanzar la meta lo más rápido que tus piernas, mente y corazón te
empujen.
Precisamente de corazón iba sobrado, tener la compañía de la
fundación me dio fuerzas para esos tramos de subida que me obligaron a parar
por segundos para poder tomar aire y seguir subiendo.
Salí con respeto, a los pocos metros del pistoletazo
empezamos a subir, rápidamente llegamos a una zona de bosque donde el ancho era
sólo para uno. En estos tramos se nota mucho si el que te precede va a un ritmo
inferior al tuyo, y si no quieres acabar agotado antes de tiempo, más vale
pedir permiso o saltar un arbusto para poderlo rebasar. Ir por encima de tu
ritmo es demoledor, pero ir más lento desgasta mucho.
En el km 2,5 ya me encontraba solo, en el km 5 hicimos un
grupito de 3 y estuvimos juntos hasta
escasos 2 km de meta, donde nos disgregamos en una bajada de vértigo para
reagruparnos una vez pasada la línea de llegada.
Llegué en la posición 36 de la general y 8 de mi categoría
con un tiempo de 1h 21’16”.
La próxima cita en Premià de Mar, 18km y 1000 de desnivel
acumulado.
Seguiremos entrenando.
Saludos.
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